Los voluntarios: pieza clave en los centros de San Juan de Dios – FISJ

Los voluntarios son una pieza clave en todos los centros de San Juan de Dios de España y del Mundo. Son esas personas que generosamente nos regalan su tiempo, sus conocimientos y su compromiso; junto a ellos trabajamos para poder ofrecer la mejor atención a las personas más desfavorecidas.

Acoger, acompañar y formar. Estos son los tres compromisos que asumimos con ellos, para que la experiencia solidaria forme parte de un trabajo conjunto de calidad. Así es la formación del voluntariado.

En la Fundación Instituto San José contamos con más de 150 voluntarios/as que semana a semana acompañan a las personas que están en las diferentes áreas de la Fundación. Los voluntarios apoyan diferentes acciones de obra social y de cooperación internacional. Dentro del voluntariado también contamos con un grupo de jóvenes, de Institutos y de la Universidad, que nos ofrecen su tiempo para contribuir a la mejora de la calidad de vida de las personas.

Rubén López Garrido. Área de Solidaridad – Responsable de Voluntariado.

María Castellanos Cobos es una de esas voluntarias que este verano pasado ha realizado un servicio de voluntariado en un centro de San Juan de Dios en Irlanda, acompañando en actividades de ocio y tiempo libre a personas adultas con discapacidad intelectual en viviendas tuteladas, (son chalets que tiene la Orden Hospitalaria en Dublín, y que pertenecen al centro de Carmona Services en Dun Laoghaire).

En este centro de Irlanda atienden y cuidan a personas con discapacidad intelectual, y la FISJ está vinculada con ellos. Por eso algunos voluntarios de la Fundación que están en ese área van allí, para conocer otra realidad y enriquecerse a través de esta experiencia.

Es el caso de María Castellanos Cobos, de 25 años, voluntaria de San Juan de Dios en la Fundación desde los 19. En agosto de 2016 ha desarrollado su voluntariado en el área de personas con discapacidad intelectual, en el centro de San Juan de Dios Dunmore House-Carmona Services Dun Laoghaire (Dublín) y así nos cuenta su experiencia:

…»El motivo por el que decidí emprender este viaje es porque quería hacer voluntariado fuera de mi país, conocer otros centros, poder formarme más como voluntaria y nada mejor que en Dublín, donde ya estuvo otro voluntario de mi misma área y vino con una buena experiencia de su estancia. Además era una oportunidad de conocer otra cultura y a una gente tan acogedora, sin olvidar que he podido mejorar mi inglés y tener momentos de oración de una manera diferente a como lo hacemos en España»

María, nos relata que cuando llegó a Dublín tuvo su primera entrevista con las responsables de los diferentes chalets tutelados con la finalidad de conocer de primera mano las opciones a desarrollar durante ese mes y la programación de actividades para realizar su voluntariado. Las responsables le ayudaron a la incorporación y la acompañaron a cada chalet para presentarla e involucrarla en la actividad diaria.

 

¿Cuál ha sido la principal dificultad que encontraste?

Los primeros días comprobé que las chicas eran muy independientes y me pregunté, ¿Qué puedo hacer? Igual no necesitan un voluntario, pensé, pero según iban pasando los días me fui ganando su confianza y pude ayudarlas. El mayor triunfo, fue realizar muchas actividades en esa misma casa con las chicas, como por ejemplo: compartir momentos de confidencias, bailes, taller de belleza o puzles. La realidad es que necesitaban ese tiempo para acogerme, había entrado en sus vidas de repente y además en época estival.

 

¿Te gustaría volver?

Si, ha cambiado mi forma de ver la vida, no descarto otro verano en el que emprender y aprender. He crecido como persona y como voluntaria; esa es mi reflexión.  Me traigo mucho cariño, momentos inolvidables, conocer otra forma de hacer voluntariado, muy enriquecedora. El cierre del voluntariado fue en una reunión con los diferentes equipos que me acompañaron para agradecer y cerrar la actividad en cada lugar en el que había estado. Vuelvo con más energía para seguir mi labor aquí. He aprendido de ellos, me he sentido como en casa por su acogedora forma de ser.

 

Saint John of God Carmona Services ofrece una gama de servicios de día y residencia, y apoyo para niños y adultos con discapacidad intelectual en el sur de Dublín. Carmona Services lleva su nombre en honor de San Juan Grande de Carmona, Hermano español de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios, que murió en 1600 y fue canonizado por el Papa Juan Pablo II el 6 de junio de 1996.

Buscar

+