Beneficios de la terapia acuática en la artritis
¿Qué beneficios tienen los ejercicios en el agua para las personas con enfermedades reumáticas como la artritis?
El trabajo en el medio acuático les proporciona a las personas con enfermedades reumáticas beneficios y cambios a nivel fisiológico en distintos sistemas: respiratorio, renal, cardiovascular, musculoesquelético y neuromuscular. Además de psicológicos como la mejoría de autoestima, motivación, entre otros.
¿Qué tipo de ejercicios son recomendables para las personas con artritis?
En una sesión de terapia acuática, se realizan diferentes ejercicios enfocados al objetivo a conseguir y trabajar como:
- Ejercicios de concienciación corporal
- Ejercicios respiratorios o buceo
- Ejercicios de flexibilización o movilidad (activo- pasivos o analítico – globales)
- Ejercicios de potenciación (analíticos o globales)
- Ejercicios de propiocepción y equilibrio
- Ejercicios de recreación
Todos ellos son recomendables para las personas con artritis, pero preferiblemente se deben realizar aquellos enfocados a los objetivos a conseguir.
¿La realización de estos ejercicios mejora los síntomas de las personas con enfermedades reumáticas?
Tras varios años de experiencia, estudios y testimonios de los pacientes, se conoce la mejoría de los síntomas de los pacientes con enfermedades reumáticas como el dolor, la inflamación, la movilidad articular, las deformidades, el tono muscular, la marcha, el equilibrio, la coordinación, entre otros.
La terapia acuática es apropiada para todas las personas con enfermedades reumáticas, independientemente de su edad, la gravedad de los síntomas de la artritis o el nivel de discapacidad, respetando y conociendo las contraindicaciones de esta terapia, debido a las características y propiedades del agua.
¿Qué se trabaja además de la resistencia y la flexibilidad?
Al igual que la resistencia y la flexibilidad, en el medio acuático, se pueden trabajar diferentes objetivos dependiendo de cada persona, como:
- Prevención o disminución del dolor (analgesia)
- Prevención la inflamación
- Conservar o recuperar el movimiento articular y flexibilidad
- Prevención y corrección de deformidades
- Fortalecer y tonificar a nivel muscular y tendinoso
- Aumentar la resistencia muscular
- Proporcionar acondicionamiento cardiovascular
- Reeducación de la marcha
- Mejorar la interacción social, autoestima, estado psicológico,
- Mejorar el nivel de dependencia o independencia
- Mantener el tejido tendinoso, ligamentoso correcto
¿Qué temperatura es la adecuada para realizar ejercicios en el agua?
Una temperatura entre 32-33º como la que encontramos en la Fundación Instituto San José, sería lo ideal, porque los músculos, tendones, ligamentos mejoran su capacidad elástica, y la relajación, y al no ser una temperatura excesivamente caliente (está por debajo de la temperatura corporal) podremos trabajar actividades de mayor intensidad para mejorar así la capacidad cardiorespiratoria.
Las personas con movilidad reducida ¿también pueden realizar estos ejercicios?
Sí, puesto que la piscina terapéutica de la Fundación Instituto San José está adaptada y acondicionada para cualquier tipo de necesidad. Gracias a la fuerza de empuje durante la inmersión, nos cuesta muy poco movernos dentro del agua facilitándose la movilidad global del paciente. Por supuesto, el profesional sanitario en este caso fisioterapeutas expertos en terapia acuática se adaptará a la situación funcional de base que trae el paciente proponiendo objetivos terapéuticos a conseguir durante el tratamiento para mantener y /o mejorar la funcionalidad.
¿Hay que hidratarse cuando se realizan actividades acuáticas?
Sí, hay que hidratarse. Es muy importante tener una correcta hidratación antes, durante y despues de la terapia acuática. En el vaso terapéutico, la sensación de sudor y sed no se perciben, pero sí están presentes. Por ello, es de suma importancia la hidratación, para mantener una buena termorregulación, evitar la pérdida de agua por el sudor y el aumento de la temperatura corporal, tras la realización de las actividades acuáticas. Además, a consecuencia de la inmersión el cuerpo humano hace una adaptación fisiológica que favorece la micción por reducción de la hormona antidiurética.
¿Es conveniente para las personas que tienen la enfermedad que realicen ejercicios acuáticos en grupo o de manera individual?
Es conveniente realizar terapia acuática con un fisioterapeuta especializado, debido a los beneficios que se obtienen. La elección de la modalidad de intervención debe ir acorde a la situación funcional y psicológica del paciente, por ello hay que tener en cuenta la patología, el perfil y las características del paciente.
Independiente de la modalidad de la sesión, individual o grupal, las sesiones se encuentran adaptadas y enfocadas a los objetivos de cada persona, para garantizar un aumento de la calidad de vida.